El 24 de junio, el gobierno del Reino Unido anunció la adquisición de 12 cazas F-35A, que serán parte del programa de Aviación de Doble Capacidad (DCA) de la OTAN. Esta decisión marca la restauración formal de la capacidad nuclear aérea británica bajo el marco de capacidades nucleares de la OTAN.

La DCA es el pilar operativo del programa “nuclear sharing” o intercambio nuclear de la OTAN, por el cual EUA mantiene custodia de armas nucleares B61 en territorio aliado y autoriza su empleo táctico con aviones de fuerza aérea de países miembros.

Al integrarse, el Reino Unido compartirá responsabilidades de reabastecimiento, seguridad y entrenamiento conjunto; sus F-35A portarán bombas B61-12 custodiadas por EUA, conforme al Tratado de No Proliferación. De esta forma, se reactiva la capacidad de ataque nuclear aéreo interrumpida desde 1998, cuando el Reino Unido retiró sus últimos cazabombarderos nucleares Tornado GR1.

Los F-35A, serán destinados a la base Marham del escuadrón 207 de la Real Fuerza Aérea, en Norfolk. Este caza puede operar en misiones aire-aire, aire-tierra, guerra electrónica y reconocimiento. Cuenta con baja firma radar, amplios tanques de combustible internos y compatibilidad total con la bomba B61-12. Además, la aeronave contará con un sistema de navegación inercial de alta precisión, complementado con capacidades anti-jamming y navegación asistida por sensores internos. Este sistema reduce significativamente el Error Circular Probable (CEP), asegurando que pueda ejecutar misiones incluso en entornos de guerra electrónica degradada o denegación de los sistemas de navegación por satélite.

La bomba B61-12 es un arma termonuclear no guiada que ofrece cuatro potencias seleccionables de 0,3; 1,5; 10 y 50 kilotones -como referencia, las bombas nucleares lanzadas por EUA en Hiroshima y Nagasaki durante la Segunda Guerra Mundial tenían una potencia de 15 y 21 kilotones, respectivamente-.

Fuentes: gov.uk – nato.int

Fotografía: prueba de la bomba B61-12