El 14 de agosto, la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa (DARPA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos informó el inicio del programa “Buque sin tripulación requerida”, en el cual se realizarán pruebas de un nuevo buque llamado USX-1 Defiant. Se trata de un navío autónomo destinado a la protección de otros buques tripulados.

Con 54 metros de eslora y 240 toneladas, el Defiant está diseñado para operar de forma prolongada en mar abierto, resistir tormentas intensas y reanudar operaciones sin asistencia humana. Uno de los principales avances que presenta es la arquitectura sin espacios habitables para la tripulación, esto es: sin pasillos, camarotes y controles manuales. Con lo que el espacio se optimiza para las operaciones navales.

Las pruebas se efectuarán bajo la dirección de la Oficina de Sistemas Marítimos No tripulados de la Armada de Estados Unidos, quien evaluará su rendimiento en escenarios reales y la posible integración en operaciones navales activas.

Estos desarrollos son respaldados desde el congreso, el cual asignó USD2.100 millones para buques de superficie autónomos.

Fuentes: darpa.mil