El 8 de mayo el buque destructor de misiles guiados USS Halsey (DDG 97, clase Arleigh Burke) de la Armada de Estados Unidos realizó un tránsito por el Estrecho de Taiwán. Según el comunicado de Comando de la Séptima Flota, el buque “transitó por un corredor en el estrecho que esta fuera del alcance del territorio marítimo de cualquier estado costero”; se declaró que fue por aguas de alta mar donde según el derecho internacional rige la libre navegación y sobrevuelo.
Según el comunicado, este tránsito “demuestra el compromiso de Estados Unidos de defender el principio a la libertad de navegación para todas las naciones”, finalizando: “Ningún miembro de la comunidad internacional debe ser intimidado ni coaccionado para que renuncie a sus derechos y libertades. El ejército de Estados Unidos vuela, navega y opera en cualquier lugar donde lo permita el derecho internacional”.
Ante este hecho, China criticó la maniobra a través de un portavoz del Comando del Teatro Oriental del Ejército Popular de Liberación, considerando que se trató de una provocación y que se desplegaron fuerzas navales y aéreas para rastrear, vigilar y hacer frente a la operación de tránsito del destructor de acuerdo con la ley y los reglamentos.
«Las tropas del Mando del Teatro Oriental del Ejército Popular de Liberación permanecerán en alerta máxima en todo momento y salvaguardarán resueltamente la soberanía nacional de China, así como la paz y la estabilidad regionales», subrayó el portavoz.
Fuentes: Comando de la Séptima Flota (EUA); China Military News