En el mes de abril el Instituto Internacional para la Investigación sobre la Paz de Estocolmo, mundialmente conocido como SIPRI por sus siglas en inglés, publicó un informe sobre el gasto militar global en 2023. El dato más llamativo es que en entre el 2022 y el 2023 el incremento del gasto fue de 6,8% en términos reales, llegando así a los U$D 2.443.000 millones (el más alto registrado por SIPRI). En promedio, el gasto militar significó un 2,3% del PBI mundial y un 6,9% de los presupuestos estatales (antes era del 0,4%); el gasto por persona alcanzó los U$D309, el mayor desde 1990.
Desagregado por subregión, el informe muestra que el mayor incremento relativo ocurrió en el Norte de África, con un 38% (Argelia es uno de los países que más lo hizo, apoyado en sus ingresos por venta de gas a Europa); luego los países de Europa del Este aumentaron en promedio sus gastos en un 31%, mientras que el resto del continente lo hizo en un 10%. En Medio Oriente el Gasto se incrementó en un 9%, mientras que en el Este de Asia lo hizo en un 6,2%. En Centro y Sudamérica el gasto disminuyó unas centésimas (-0.4% y -0.3% respectivamente).
Respecto al porcentaje de PBI dedicado a defensa, Ucrania le dedica un 35% de su producto a los gastos de guerra, alcanzando los U$D64.000 millones; mientras que Rusia le destina un 5,9% de su riqueza, con U$D109.000 millones de gasto total. Los países de la OTAN gastaron en conjunto U$D1.341.000 millones; solo once de los 31 países de dicha organización lograron alcanzar la meta del 2% del PBI destinado al gasto militar en 2023 (cuatro más que en 2022).
Fuente: SIPRI