El 3 de septiembre de 2025, durante una visita a Kiev, el secretario de Defensa del Reino Unido John Healey declaró que más de mil millones de libras esterlinas (aproximadamente 1.350 millones de dólares) destinados a ayuda militar a Ucrania provinieron de los beneficios generados por activos rusos inmovilizados. Estos fondos se utilizaron para amortizar parte de un préstamo soberano británico de aproximadamente 3.000 millones de dólares (equivalente a 2.260 millones de libras) proveniente del fondo ERA (por Extraordinary Revenue Acceleration: Financiamiento por ingresos extraordinarios).
El fondo ERA es una iniciativa multinacional del G7, con un total comprometido de alrededor de 50.000 millones de dólares, diseñada para financiar a Ucrania mediante préstamos reembolsables exclusivamente con los ingresos generados —intereses y rendimientos— de los activos rusos congelados, sin tocar el capital principal. En el caso británico, el préstamo fue estructurado en tres tramos de aproximadamente 1.000 millones de dólares cada uno (equivalentes a 752 millones de libras). Ya se han desembolsado los dos primeros tramos: el primero en marzo de 2025, el segundo en abril de 2025, y el tercero está previsto para 2026.
Parte de ese financiamiento —específicamente unos 95 millones de dólares (aproximadamente 70 millones de libras)— fue utilizado para la adquisición de 350 misiles ASRAAM adaptados al lanzamiento terrestre, junto con sistemas de defensa aérea Raven, en uso por Ucrania. Además, con los recursos del mismo préstamo se cubrió la provisión de cientos de miles de proyectiles de artillería, misiles de defensa aérea de diferentes alcances, drones de reconocimiento y ataque, vehículos blindados, equipos de comunicación táctica y repuestos para mantener operativos los sistemas ya en servicio. También se financiaron contratos de mantenimiento y reparación para vehículos y plataformas militares, asegurando la sostenibilidad de los equipos entregados, y se respaldó el desarrollo y adquisición del sistema Gravehawk, un modelo de defensa aérea de corto alcance diseñado para neutralizar VANT, municiones merodeadoras y otras amenazas a baja y media altitud.
Durante su visita Healey declaró que “Putin está más débil que nunca” y que su dependencia de otros aliados demostraba la fragilidad de su posición (por el cónclave que mantuvo con Kim Jon-un y Xi Pinging). Subrayó que el Reino Unido estaba “devolviendo el dinero de Putin con intereses, en forma de misiles para Ucrania”, al tiempo que condenó el impacto de un misil ruso en un edificio del gobierno británico en una zona civil, calificándolo de “indignación”. Healey añadió que Londres se prepara para un eventual alto el fuego y afirmó que “desde el primer día habrá aviones británicos en el cielo y tropas británicas en tierra”, reafirmando además el compromiso con la Coalición de Voluntarios y el aumento de la capacidad operativa de las fuerzas armadas británicas para sostener el apoyo a Ucrania.
Fuentes: gov.uk, Reuters, The Sun
Fecha: 05 de septiembre de 2025